El Remanso

domingo, agosto 06, 2006

1. Sueña. . .

¡Sueña, y que tus sueños no sean vanas ilusiones!

Ama la vida, y haz de ella una gran bendición para la humanidad.

Cultiva el heroísmo, desinteresado y generoso. Sintiéndote
útil te alejarás del pesimismo y el hastío.

Aléjate del delirio que provoca el materialismo. Valora por sobre todas las cosas, todo lo que sea noble, todo lo que te enriquezca espiritualmente.

Cada instante de la vida tiene un precio incalculable. ¡Cuídalos, valen oro! Es fácil dilapidar el tiempo, pero jamás lo volverás a recuperar.

Esfuérzate en alcanzar las metas más elevadas para tu existencia. Quien no siembra esfuerzo, cosechará mediocridad.

Comparte las cosas lindas y buenas de la vida con tus amados. La belleza y la bondad volverán a ti generosamente.

Mantente dispuesto a ser ejemplo y nunca seas tropiezo para los que gozan de tu confianza y compañía.

¡Y adelante con optimismo!
La vida es bella si la sabemos construir con sabiduría e integridad.
Margarita Sharp de Priora

5 de julio de 1999